La administración de un laboratorio implica la gestión eficiente de recursos, personal y procesos para garantizar la calidad y efectividad en los servicios que ofrece. Para ello se debe realizar la planificación, organización, dirección y control de todas las actividades que se llevan a cabo en un laboratorio, ya sea clínico, de investigación o de otro tipo. Su objetivo principal es asegurar que el laboratorio funcione de manera eficiente y cumpla con las normativas y estándares de calidad establecidos.

Dentro de las competencias que el estudiante será capaz de realizar en su vida profesional se encuentran aspecto clave como: conocimientos técnicos, habilidades de gestión, conocimientos en calidad y normativas además aspectos importantes para la gestión del personal y la gestión financiera tanto en el sector público como privado.